lunes, 4 de noviembre de 2013

la bella y el bestia 2















Llegue temprano al trabajo y me puse a esperar a la pasante cuando llego algo retrasada le dije
-has llegado tarde y eso no me gusta ve por la escoba y trapeador
-pero yo no soy afanadora
-no te he preguntado lo que eres o no eres, dije VE POR ESCOBA Y TRAPEADOR, te queda claro
-si, pero
-te dije que no hay peros
ella enrojeció y furiosa fue  a buscar lo que le había ordenado, cuando volvió le dije que limpiara el cubículo
-y eso harás cada vez que llegues tarde
-esto es humillante, mis uñas se van a echar a perder
la mire fijamente y le dije
-ponte a limpiar
ella barría torpemente pero termino su mayor problema fue usar el trapeador, cuando me acerque a ver como lo hacia vi que estaba llorando, le dije que se apurara que estaba perdiendo el tiempo
-pero es que esto no es mi trabajo
le tome del cabello y con firmeza la lleve frente al escritorio, la puse con las manos apoyadas en el escritorio, tome una revista y con ella le di una serie de azotes en sus nalgas
-auucchhh, ayyyy, duele
-silencio o será mayor el castigo
ella se callo y termine de darle unos azotes más, la deje ahí parada y fui a sentarme, ella se quiso separar del escritorio y le dije
-no te he autorizado el moverte, te quedas ahí
ella se me quedo viendo y después bajo la cabeza y se quedo quieta, me pregunto
-hasta cuando estaré aquí?
-hasta que yo quiera y creo haberte dicho como debes dirigirte a mi
-si, perdone, SEÑOR
tome con calma mi taza de café y decidi salir un rato, antes de salir le dije
-no te mueves hasta que yo te lo ordene
-si, SEÑOR, así lo hare
me fui por espacio de una hora, cuando regrese ella estaba ahí justo donde la había dejado, llegue a su lado y le pregunte
-¿te duelen las piernas?
-Si, SEÑOR, mucho
-bien ve a caminar trae documentos de la biblioteca y clasificalos

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