Salimos temprano ese día rumbo a la zona de la ribera del río una zona donde hay mucha vegetación y poca gente circulando asi se podria hacer algo con la aprendiz de perra, llegando a la orilla del río le dije que se desnudara, tome su ropa y la guarde en la mochila, saque unas ligas y con ellas le aprete las tetas, tome unas pinzas y se las coloque en los pezones, corte unas ramas que estaban cerca de nosotros y con ellas comence azotarle las piernas y las nalgas, ella grito al sentir los azotes, las marcas de las ramas se notaban en su piel, le dije que caminara, ella comenzo a caminar con dificultad ya que en el suelo había ramas, piedras y no le era fácil avanzar así que seguía dandole con las ramas en su nalgas y comence a darle en su espalda, ella gemia al sentir los azotes y porque las pinzas se le movian y le jalaban los pezones, cuando llegamos a una zona donde habia arboles con algunas ramas bajas le ordene que se detuviera, le junte las manos y pase la soga por una de las ramas del árbol y la jale a modo de obligarla a quedar de puntas, tome una de las ramas con una ligera punta y comence a picarle por los costados, ella gritaba a cada piquete que le daba, sus lagrimas comezaron a salirle, segui dandole de piquetes y tambien le hacia sentirlo en las plantas de sus pies, ella gritaba y me decía que le dolía, le solte las pinzas de sus pezones y su grito fue fuerte, le quite las ligas y sus tetas que ya estab moradas se liberaron de las ligas.
La solte de la soga y le permiti descansar un momento, cuando se recupero le ate una soga a su cintura y hice pasar por su raja y su culo, le habia hecho unos nudos previamente y de ahi la jalaba para hacerla caminar, la jalaba con fuerza lo que le provocaba un fuerte roce en su raja la lleve hacia al río y donde pasaba una corriente la lleve y la coloque sobre una piedra, ella sentia como el agua la golpeaba y se quejaba del golpe del agua, mientras ella estaba ahi yo me quite las botas y el pantalon y entre al agua, la coloque a modo de que me chupara el trozo mientras ella seguia sintiendo el roce del agua, la tomaba de la cabeza y le hundia con firmeza mi trozo, ella salivaba y cuando le sacaba mi trozo su baba le escurria, la hice chuparlo hasta que me corri en su hocico, ya que me limpio mi trozo la saque del agua, le quite la soga de su raja y la lleve de nueva cuenta al árbol la ate al árbol y le llene su cuerpo con una hoja irritante, la deje ahi me sente a la sombra del árbol y decidi dormir una siesta.
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