susana

La cotidianidad de la vida hace que muchas personas se nos vuelvan habituales sin conocerlas, todos los días compartiendo un espacio así me sucedió con Susana, una mujer algo madura que todas las mañanas comparte conmigo el medio de transporte para ir al trabajo, habitualmente llevo un libro para ir entretenido mientras llego al trabajo, un día por la lluvia no lleve libro y fue cuando Susana se decidió a hablarme.
-y el libro?
-hoy por la lluvia no lo traje
-todos los días veo que lees algo, algunas veces copio el titulo y los he buscado en las librerías
-bueno, espero que si los has leído te gusten
-y bueno no los he comprado todos, pero si algunos
la lluvia comenzó a arreciar y le dije
-seguro que no hay trabajo, hoy
-si así parece, llamare a mi oficina
ella llamo a su oficina y le comunicaron que quizás no hubiese labores
-vaya y ahora que haremos?
dijo tocándome la pierna, el transporte pasa por un motel muy conocido y pues arriesgando le dije
-alla estará seco y con buen clima
-que atrevido
-vamos
ella me apretó la pierna y yo pedi la parada bajamos y algunos metros nos mojamos, pague la habitación y llegamos a ella, íbamos mojados así que le dije
-habrá que desnudarse ´para que se seque la ropa
ella asintió y comenzó a quitarse la ropa, su cuerpo no era muy escultural pero aun se mantenía firme, yo me desnude y me quede parado a la orilla de la cama, ella se acerco y se arrodillo y comenzó a lamerme las bolas, las lamia y yo deje que las chupara mientras le tocaba sus tetas que aun se sentían firmes, poco a poco comenzó a subir su lengua y su boca y se comenzó a tragar mi trozo, yo la tome de la cabeza y comencé a meterle y sacarle mi trozo de su boca, ella lo lamia y lo tragaba, le saque la cabeza y ella comenzó a lamerlo le metia la lengua al hueco de mi trozo, cuando mi trozo estuvo duro, me dijo
-quiero que me cojas de a perrito
la puse a cuatro patas y le deje ir mi trozo con fuerza, se lo empujaba fuerte tomándola de la cadera y haciéndola gemir, le deje caer un hilo de saliva mojándole el culo y después le pase mis dedos y ella me dijo
-el culo nunca me lo han jugado
le di un empujon fuerte con mi trozo y le deje ir un dedo en su culo, ella  gimio pero no dijo nada le metia el dedo al ritmo de mis embestidas, después le saque el dedo le volvi a escupir el culo y regrese con dos dedos a su culo, ella apretó ligeramente las nalgas y le dije
-aflojalo, de todos modos voy a seguir usándolo
deje de bombearle la raja y ella empezó a mover sus caderas hacia mi, bajo más la cabeza y levanto las nalgas dejándome expuesto su culo, segui metiéndole los dedos ampliando su culo, lo dilataba y lo escupia, ella mientras me mojaba mi trozo con sus flujos, estaba muy mojada le escurrían sus flujos, saque mi trozo y estaba blanco de los flujos que ella había derramado, le dije
-quiero meterla en tu culo
ella me dijo
-lo sé y pues si quieres hazlo
empuje la cabeza de mi trozo a su culo y poco a poco se lo meti, ella se apretaba las manos en la almohada y mantenía sus caderas poco a poco comencé a meter y sacar mi trozo de su culo y ella se fue relajando y con mis dedos la masturbaba, le jugaba su raja y le metia los dedos, ella comenzó a mojar mas y dejaba mis dedos muy babosos, le escupia el culo y seguía metiéndole mi trozo, poco a poco comencé a hacer más fuertes los embates de mi trozo hasta que ella se volvió a agachar y a tomar la almohada mordiéndola y asi lo hizo hasta que me corri, llenándole el culo con mi leche
ella poco a poco se recupero y me dijo
-todos estos días lo imaginaba pero la realidad supero mi imaginación