lunes, 17 de agosto de 2009

sesiones


Amo. Me postro a sus pies.

Este diario considero que será muy especial puesto que le contaré de una cantidad de sucesos que no le he podido contar por falta de tiempo. Tiempo que no tuve para escribir el diario pero sí para cumplir con mis deberes de sumisa.

El domingo fue un día donde puedo jurar que lo recordé a más no poder. Me levanté con mucho frío puesto que por orden suya ya duermo desnuda y atada. Siempre que quiero colocarme en una posición más cómoda y siento las cuerdas... siento cada vez mi sumisión a usted mi Amo. Recuerdo mi condición y mi naturaleza y soy feliz porque se haya desatado y de esta forma tan maravillosa.

Cuando recibí su sms inmediatamente fui a cumplir con su tarea. Até mis senos con la cuerda y lo mantuve así todo el día. Lo pensé siempre Amo. Era una tarea psicológica tambén donde sentía en cada momento las cuerdas en mis senos y mi condición de perra. Mis senos por ser grandes disimulaban en cierta forma las cuerdas... así que estuve ese día haciendo mis labores sin ningún problema. Sólo que a veces molestaba y me masajeaba porque duré horas con ellas.

A las 5pm de la tarde recibí su correo de las pinzas en otras partes del cuerpo. Me sentí tan excitada de que quiera adornar más a su perrita que lo hice en ese momento. Cerré la puerta del cuarto, me desnudé, coloqué el espejo del tocador en mi cama y comencé a adornarme.

Primero coloqué las pinzas de los pies. La cual no me dolió pero si me molestó un poco. Luego proseguí a colocarme las de mis muslos y esa sí que me dolieron Amo. Es que son muy delicada con esa parte. Me dolía mucho pero las coloqué. Ya puestas todas sentí la molestia de las cuerdas en mis senos, el dolor de mis muslos y mis pies durmiendose. Me observé en el espejo y me excité demasiado. Ver mi condición, mis marcas, los adornos, lo orgulloso que estaría de su perrita. Mmmh... no aguanté y me toqué Amo hasta correrme como la perra que soy. Mi cuerpo rojo y adolorido me excitaba cada vez más.

Ya cuando me corrí fue que quité las pinzas. Pero la cuerda la mantuve hasta la noche que lo conseguí y me permitió quitarmelas.

Amo... la noche del domingo me sentí como en la gloria. Estando con usted y cumpliendo en ese día otra tarea. Soy adicta a mi Amo... estoy aferrada a usted. Sentir el dolor que me impone que es su placer es mi alimento diario. Así como me pidió en ese momento fui y busqué el tenerdor, el hielo y el vaso de agua.

Puse a remojar el hielo y comencé a presionar los dientes del tenerdor en mis muslos (que poco antes sintieron las pinzas), mis costados, mis senos y el vientre. Hacia presión hasta marcar un poco. mmmmh Amo... la piel se me erizaba por completo.Con mis rasgos masoquistas era capaz de arañarme por completo pero no lo hice. Lo hice como me lo pidió... lo presioné suavemente. Que rica sensación... me mojaba poco a poco al sentir los dientes del tenedor en mi cuerpo, rasguñandolo poco a poco. Mis senos estaban adoloridos pero cuando lo pasé por allí me mojé aún más. Sentía como cierta electricidad mi Amo. Frotaba el pezón con los dientes y parte del pezón entraba entre el tenedor... los halaba hacia arriba estirandolos un poco y soltándolos.

Comencé a frotar mi raja de puta con el hielo y se mezclaba con mis flujos. Estaba mojadísima. De sólo recordarlo me excito otra vez mi Amo. sentía el frio en mi raja y mi cuerpo se alzaba como contorcionandose del placer. Metí un cubo de hielo por mi vagina y entró facilmente. Lo dejé allí y con otro hielo me frotaba. Amo me hubiera podido correr en ese mismo instante pero aún quedaba tarea por hacer.

Tomé un gran sorbo de agua y lo derramé por todo mi cuerpo. El cuerpo de perra que lleva sus marcas Amo. Cayó sobre mis senos duros, erguidos y marcados. Sobre mi vientre. En mi raja ya mojada y caía al suelo Amo. Su perra estaba en un estado de extasis inimaginable al repetirse a si misma.. "Amo" "Gracias Amo" "Si, mi Amo" "Le ofrezco mi dolor Amo"; todo eso en voz alta como si estuviera aquí conmigo.

Amo... estoy tan excitada de recordarlo que al escribir este diario estoy frotando mi raja de puta Amo. Su perra está en celo.

Allí volví a usar el el tenedor pero esta vez en mi raja. Hacía estrajos con mis labios exteriores e interiores y con mi clítoris... Amo... de solo recordarlo ya quiero tocarme y correrme como la puta que soy. Soy una perra en constante celo.

Presionaba mi clítoris... lo punzaba y lo empujaba. Todo al mismo tiempo mi Amo. Mi clítoris estaba muy erguido... sentía todo inflamado... listo para un gran orgasmo. Bebí más agua y la derramé en mi cuerpo. Al pasar por mi raja la azotaba. Chapoteaba.. se escuchaba el ruido de mi raja de perra, le daba más duro y ya lo sentía latir.

Con la manga comencé a frotar el clítoris, suavemente como me pidió. Pero en mí Amo lo quería hacer a toda velocidad. Lo hice así como me pidió... Amo me tiene tan dominada. Usted sabe a la perfección que mi cuerpo no iba a aguantar mucho y sin embargo me pide más y más.

Volteé el tenedor y con los dientes volví a frotar mi clitoris pero ya no podía aguantar más, me iba a correr. El flujo era más espeso y viscoso. Ya no aguanataba más. Le súplique correrme y en su benevolencia me lo permitió. La corrida fue intensa, sentía como los flujos bajaban por la silla y muslos. Mi cuerpo quedó contorcionados y tenso.

Quedé exhausta ese día Amo. Lamí mis jugos y el agua del piso como la perra que soy mi Amo.

El lunes me levanté y almorcé en mi bol en posición de perrita. Espaguetí con salsa blanca y croquetas de camarones. Tomé agua lamiéndolodo y al terminar y verme al espejo... por más cuidadosa qu fui estaba embarradisima Amo. Muy embarrada.

Esa noche del lunes mi Amo... me di cuenta de lo aferrada y adicta que estoy a usted. Me hizo mucha falta y sólo pensaba en estar con usted. Lo cual hizo que me mojara y fuera al baño en la casa de mi amiga donde me quedé durmiendo a frotar mi raja de puta.

Esta noche espero encontrarlo mi Amo.

Me postro a sus pies y los beso mi Amo.

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