una aventura

Acabo de llegar a la oficina y comienzo a escribir este diario por orden de mi amo, aun no se si llegare a cumplir todo lo que me exige porque esperaba algo mas gradual, mas lento.

Anoche probe con la pasta de dientes mentolada, no es la que solemos usar pero por error habiamos comprado un tubo hace un mes y ahi estaba guardado.

A eso de las nueve de la noche de ayer domingo, me fui al cuarto de baño y le dije a mi marido que me daría un baño relajante y largo. Lo primero que hice fue llenar la bañéra con agua bastante caliente y eche sales. mientras se llenaba, recorte el vello pubico y luego me di agfua caliente y jabon para suavizar; despues cogi una cuchilla nueva y me rasure lo mejor que pude. la parte posterior fue la que mas me costó, pero me ayude con un espejo. Me mire despues en el espejo del cuarto de baño, me encontre extraña, diferente.

Antes de meterme en la bañera, probe con la pasta de dientes en mis labios y en mis pezones. Al principio no senti casi nada, apenas un frescor, pero poco a poco comence a notar que el frescor se convertia en una especie de escozor que oco a poco iba en aumento hasta hacerlo insoportable.

Habia buscado antes unas pinzas de la ropa, elegi alguns que no apretasen demasiado y mientras el mentol me escocia, probe con las pinzas en los labios. provocan un dolor soportable pero cuando probe en los pezones no lo aguante y me las tuve que quitar inmediatamente.

No queria fracasar ya, tan pronto y probe a contar hasta diez con ellas puestas. Lo logre y al quitarmelas note que me dolia mas que con ellas puestas, asi que lo intente de nuevo y me las puse y conte hasta quince. Aguante y senti que tanto el escozor como el dolor de las pinzas se habian convertido ens ensaciones soportables. Si me resistia a ella, dolia, pero si simplemente las sentia lograba aguantarals.

Debo reconocer que me senti orgullosa y asi, pinzada, me intgroduje en la bañera y me senti mas libre.

En el agua, pensando en todo esto, recordando los relatos, me masturbe imaginando que es lo que me esperaria en el futuro.

Al salir del agua, me examine los pezones para ver si me habia hehco alguna marca que se notase. El dolor al quitarme las pinzas fue insoportable, fue como sise despertase ese dolor dormido que habia tenido conmigo durante todo el baño. los labios apenas me dolieron, pero el frescor/escozor me aocmpaño toda l anoche.

Hoy he recibido otro correo de mi amo. Es respecto a indumentaria. En verano he salido a veces in sujetador a la calle, nunca sola, pero sin bragas jamas, a excepcion de alguna vezx en la playa y por peticion de mi marido. me ha costado mucho decidirme y solo lo he logrado porque he metido en mi bolso unas bragas y un sujetador, por si me arrepentia a lo largo de la mañana.
Mas trabajo aun me ha costado elegir la ropa adecuada, una camisa que no denote demasiado mi desnudez. Al fin elegi una estampada, com cuello barco y sin mangas.

Cuando he puesto el pie en el portal de mi casa, he tenido que armarme de valor para salir a la calle; luego, caminando hacia le metro, sentia que todos los ojos me miraban y adivinaban mi desnudez. Caminar por la calle y sentirme desnuda ha sido una experiencia excitante y arriesgada, sentia mi pubis desnudo, el roce de la parte alta d emi muslo... cosas en las que nunca habia reparado.

15:30 Sigo el diario en mi casa, ya de regreso de la oficina; segun he llegado me he desnudado y me he dado una ducha larga. Ahora estoy aqui, ante el odenador, desnuda, escribiendo mi dario. ¿por qué desnuda? no lo se, ha sido un impulso. Es frecuente que en casa este tan solo con unas bragas, pero desnuda totalmente jamas, menos hoy.

Mi dia en la oficina ha sido normal salvo por la alerta que he mantenido siemrpe sobre como sentarme y recordando ir de vez en cuando al baño a mirar por si acaso habia manchado la falda. Durante todo el dia he tenido un flujo continuo, nada habitual en mi, quizas por el hecho de saberme desnuda y el riesgo de humedecer la tela haya provocado este exceso de flujo.

Ademas, el estado permanente de suave excitacion que he tenido, que tengo, desde esta mañan ha debido contribuir mucho a ese exceso de flujo que de vez en cuando he limpiado en el cuarto de baño de la empresa.

A las doce y media, arovechando que debia ir a la facultad a por unos informes, me desvié hacia unso grandes almacenes y me dirijí a la zona de lenceria. No es facil encontrar depedientes masculinos en esa zona y me fui de allí y me diriji a la calle Serrano donde recordaba dos tiendas delenceria, muy caras pero muy selectas ambas. En la primera solo habia dependientas y decidi probar solo una vez mas, si no habia hombre cumpliria como m ejor pudiera el mandato con una mujer.

En la segunda tienda habia una dependienta y el que parecia ser el encargado, un hombre de unos cincuenta y tantos años, empece a mirar y cuando la dependienta se acerco a mi la evite diciendole que solo estaba mirando. Estaba muy nerviosa porque nos abia como enfocar el tema, tampoco pretendia decir con exactitud las palabras propuestas por mi amo sino algo simlar que no sonara tan fuerte, ademas no queria que esa conversacion fuera escuchada por nadie mas.

Estaba a punto de desistir cuando la dependienta comenzo a atender a una señora y yo aproveche para acercarme al encargado y le pedi ver alguna prenda tipo tanga
me pegunto si la queria de alguna forma concreta, supongo que yo estaba como un tomate de roja y le dije en un tono muy bajo que queria un modelo muy sensual, muy provocativo. casi no me atrevia a mirarle a la cara; el, muy correcto en todo momento, me dijo "un momento señora, voy a buscar algunos modelos"

Los tangas que trajo eran preciosos, casi todos temrinando en una zona triangular en la parte de atras. No sabia como seguir, no tenia ni idea de como plantear el tema sin caer en lo vulgar.

"Quisiera algo mas provocativo, es para una ocasion especial" me atrevi a decir.

me mire las cintas en mis muñecas, en ese momento me hubiera gustado que fueran mas claras en cuanto a su significado, que fuera evidente que se trataba de correas de sumisa; esa idea absurda me dio valor, ademas el hecho de ver que mis comentarios no me ponian en ninguna situacion desagradabe y que el tono del encargado seguia siendo repsetuoso me infundio valor. Cuando trajo otros modelos, elegi uno muy pequeño, con un fino hiloen la cintura y hacia atras y apenas un pequeo triangulo de tela delante.

"me llevare este, seguro que a mi amo le encanta" Rogué por que hubiera entendido "mi amor" en lugar de "mi amo", en realidad lo dije muy rapido para provocar esa confusion

le mire buscando alguna expresion en su cara y comprendi que me habia oido perfectamente, dijo algo asi como "en ese caso, tengo otros modelos que quizas le parezcan mas adecuados, si me permite.." y salio hacia la parte de atras. Yo vigilaba a la dependienta pero seguia atrendiendo y creo que ajena a mi conversacion.

Aparecio de nuevo con un tanga en piel negra,muy fina, con una cadena de eslabones metalicos pequeños cogida a la cintura, lo tomo en sus manos y lo estiro para que lo viera y aquello me acobardo porque senti la mirada de la dependienta, pero ya estaba todo hecho y no podia echarme atras. me miro directamente a las caderas y dijo que creia que esa seria mi talla, me senti desnuda con esa mirada, era evidente que ya n me trataba com a una señora y yo en cualquier otro momento le hubiera puesto en su sitio, pero me lmite a dejarme tratar asi.

Le dije que preferiria una talla menos y repetí, " es un capricho de mi amo", el sonrio con complcidad y dijo "comprendo", me trajo el tanga algo mas pequeño y me ofrecio el sujetador a juego, yo le dije que lo consultaria, no se porque lo dije, pero me salio asi. Cuando me lo iba a envolver, de pornto se detuvo y me dijo que si deseaba llevarmelo puesto, habia un probador en la trasera. Senti una punzada de peligro, por otra parte supuse que a mi amo le gustaria que diera un paso mas y ademas estaba la dependiente, no podia pasar nada. me arriesgue y le die que si. dandole las gracias. me acompaño a la trasera con el tanga en sus manos y al hacerme pasar puso su mano en mi espalda un segundo, algo que no habria permitido en otra situaicon pero que en ese momento no evite. me dijo que si necesitaba algo, "cualquier cosa" remarco, estaria cerca, en un tono que me parecio insinuante.

la idea de llevar puesto el tanga me gustaba, asi que cerre la cortina, deje el bolso colgado y tome el tanga y me lo puse. Con la falda levantada me mire com me quedaba, demasiado justo para mi, pero asi tenia que ser, me volvi para mirarme por detras y entonces vi al encargado a traves d euna rendija que habia quedado en la cortina del probador. hice como que no le habia visto mirarme y sali del probador. me ofrecio otro modelo pero no qusie arriesgar mas y le dije que no deseaba mas. sali fuera y abone la compra. luego fui a la facultad y depues a casa.


Eso es todo por ahora, espero haber cumplido todo bien, ha sido mucho mas d elo que en principo estaba preparada para hacer.