sábado, 17 de octubre de 2009

exhibiendola


Tuve que juntar bastante coraje para esta prueba. Me puse una falda
de gasa en grises y blancos casi transparente y una blusa de seda >blanca. Obviamente tape todo con un abrigo hasta llegar al centro
comercial. Aunque lo único que me tapaba en ese momento era el
tampón. Tamaño medio en lugar de grande...Le deje suelta la cuerdita
para que me recordara el riesgo. Y lo hizo. La verdad, moria de
pánico.

Como me gusta el peligro...me dije..si hay que hacerlo, lo hacemos
bien.... la falda, como dije, no solo es medio (bastante)
transparente sino que además cierra cruzada y atándose a la cintura.
Al ser la tela tan liviana, el cruce se abre y juega todo el tiempo
exponiendo las piernas. Por mas que le puse un pequeño broche a unos
15 cm de mi rajita me sentía desnuda (lo estaba), helada por los
nervios y por el frío que me penetraba por debajo

Lleve un libro. Me senté en una de las cafeterías y ordene una
lagrima (leche caliente cortada con café). No se cuanto tiempo me
quede, pero me pareció una eternidad.

Mis pechos estaban duros. Los pezones saltaban de la blusa. Mi
rajita latía de la excitación. Y yo tratando de poner cara de nada.
Se me cortaba la respiracion cuando entreabria un poquito las
piernas.

Se que me miraron mucho. Llamaba la atención. Mucho. Pero no puedo
recordar ni una cara. La mayor parte del tiempo mire para abajo.
Sentía mucha vergüenza y humillación. No tenia puesto mi collar de
perra pero lo sentía ajustándome el cuello. Suya. Un placer extremo.

1 comentario:

Shi dijo...

La sutileza de este junto con el sentimiento de ir comenzando por un camino sin retorno es muy interesante, me acuerdo cuando yo empece asi